En el evento, se destacó cómo esa política pública puede contribuir para una alimentación saludable y como estrategia de protección social.
Paulo Beraldo y Palova Brito
Brasília, Brasil, 29 de maio de 2025 – Durante el workshop acerca del poder social y la alimentación escolar a través de adquisiciones de alimentos sostenibles, llevado a cabo el 27 de mayo, en la 5ª Conferencia Global de la Red «One Planet» de Sistemas Alimentarios Sostenibles, se destacó la importancia de los programas de alimentación escolar hacia la transformación de los sistemas agroalimentarios. La 5ª Conferencia Global se llevó a cabo en la ciudad de Brasilia, Brasil, del 27 al 29 de mayo.
El evento reunió a expertos, representantes de gobiernos, sector privado, organizaciones de la sociedad civil y la academia para discutir soluciones para transformar los sistemas agroalimentarios. La iniciativa es organizada por el Programa de Sistemas Alimentarios Sostenibles, una asociación multisectorial cuyo objetivo es acelerar la transformación hacia patrones sostenibles de producción y consumo de alimentos y el Ministerio de Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Combate al Hambre (MDS) de Brasil.
La Red de Alimentación Escolar Sostenible (RAES) fue representada por Najla Veloso, secretaria ejecutiva de la Red y especialista sênior de la FAO. En su participación, Najla Veloso destacó la necesidad de estructurar y establecer marcos normativos que permitan la operacionalización de las compras públicas – tanto para las instancias que compran como para las cooperativas, asociaciones y productores que venden.
Mencionó el caso exitoso de Brasil, donde el Programa Nacional de Alimentación Escolar (PNAE) funciona de manera colaborativa entre estados, municipios y el gobierno federal, con una gestión descentralizada. “Muchos países ya han reconocido la importancia de las compras públicas, pero no siempre cuentan con marcos legales u organizativos que permitan su implementación efectiva. Es difícil hacerlo si no hay una guía y un acompañamiento claro para los actores”, dijo. Veloso agregó: “necesitamos mecanismos para favorecer que las organizaciones de productores familiares puedan acceder a las compras públicas. Además, hay que comprender que esa política es estratégica para el cumplimento de varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”.
Veloso enfatizó que el concepto de alimentación escolar es una política estratégica para garantizar el derecho humano a alimentación adecuada y saludable a todos los estudiantes. Eso independiente de la clase social, etnia, raza, género o edad. “Es una condición de enfrentar los indicadores de malnutrición así como para mitigar la exclusión en los sistemas agroalimentarios”. Concluyó afirmando que las compras directas a la agricultura familiar son condición esencial para avanzar hacia programas de alimentación escolar sostenibles.
Desde Brasil, también participó del workshop Renata Mainenti, coordinadora de apoyo al control social del Fondo Nacional de Desarrollo de la Educación (FNDE), que compartió la experiencia del PNAE, que atiende universalmente a 41 millones de estudiantes, diariamente. Asimismo, resaltó que el país cuenta con una Ley de Alimentación Escolar que determina que por lo menos 30% de las compras de alimentos para las escuelas sean de la agricultura familiar. En el año 2022, el promedio de compras públicas de la agricultura familiar alcanzó un 45%.
Mainenti resaltó la importancia de reducir los impactos del cambio climático a través del fomento a los circuitos cortos de producción y consumo y promoción de prácticas orgánicas y agroecológicas como una “prioridad”. «Por lo tanto, la alimentación escolar puede fomentar el desarrollo territorial local e impactar en distintas áreas – educación, salud, nutrición, producción», señaló.
Ella concluyó destacando la cooperación por medio de alianzas con la Agencia Brasileña de Cooperación (ABC), el Programa Mundial de Alimentos (WFP) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la creación de espacios regionales como la Red de Alimentación Escolar Sostenible (RAES). “Quiero destacar la importancia de estas redes, donde la alimentación escolar no solo una forma de garantizar comida a los estudiantes, sino que un motor para la transformación de los sistemas agroalimentarios”, afirmó.
